Presuntos PEI Aterrorizan y Amenazan a Testigo

GERARDO E. VARGAS ORTEGA/ Periodismo Nayarita

Tecuala, Nay; mzo 4.- Luego de haber sido sometida a una serie de torturas físicas y sicológicas por medio de la cual elementos de la Policía Estatal Investigadora, PEI, pretendían forzarla a denunciar y señalar a un “chivo expiatorio” como el responsable del homicidio del comerciante Esteban Zambrano Torres, la Señora Graciela Guzmán Salas presentó una denuncia en contra de los P.E.I por delitos contra la integridad física con número de expediente EC/II/EXP/50/09, la cual como era de suponerse no ha tenido avance alguno, por lo que decidió acudir a la Comisión Municipal de los Derechos Humanos con sede en Acaponeta Nayarit, donde se integró el expediente DH/ACA/80/09, en el que narra la serie de vejaciones y torturas a las que fue sometida, las que a continuación se transcriben de forma textual.

GRACIELA GUZMAN SALAS, quien manifiesta actos presuntamente violatorios de Derechos Humanos cometidos en agravio, atribuidos a ELEMENTOS DE LA POLICIA ESTATAL DESTACAMENTADA EN TECUALA, NAYARIT consistentes en EJERCICIO INDEBIDO DE LA FUNCION PUBLICA, ABUSO DE AUTORIDAD, GOLPES, LESIONES Y AMENAZAS, a quien le exhorto para que se conduzca con verdad en la diligencia que va a intervenir y ofreciendo así hacerlo;



M A N I F I E S TO

Quien dijo llamarse como ha quedado escrito, ser de nacionalidad mexicana, de 47 años de edad, de estado civil, soltera, originaria y vecina de Tecuala, con domicilio en la calle Oaxaca número 34 colonia centro, quien sabe leer y escribir, comerciante, con servicio telefónico xxxxxx, quien se identifica con credencial de elector con número de folio 112291875 y sin más generales que manifestar;



D E C L A R A

Que el día 22 veintidós del mes de Febrero de 2009 dos mil nueve como a las 11:00 once o 12:00 doce horas, estaba en mi domicilio cuando llegó un oficial de la Policía Estatal Investigadora acompañado de otro elemento en un carro con logotipo de la policía estatal, adscritos a Tecuala porque los conozco y porque los he visto en la patrulla y me manifestó el oficial que si lo podía acompañar hasta sus oficinas para hacerme unas preguntas y una vez estando en las instalaciones me hicieron una serie de preguntas, que si había visto a una persona que había fallecido fuera de mi casa y yo les contesté no, que sólo escuché gritos de auxilio afuera de mi casa en la banqueta y abrí la cortina y vi al señor tirado en la banqueta y le hablé a un taxista para que le hablara a los familiares, y me dijeron retírese y me fui a mi negocio y regresaron a la media hora y me dijeron que si los podía volver a acompañar y un oficial me dijo que viniera porque el comandante quería platicar conmigo y los acompañé hasta las mismas oficinas y una vez estando allí, el comandante me dijo que no le iba a ver la cara de pendejo que no se tragaba las chingaderas que le había dicho, y que no anduviera con pendejadas y que dijera todo lo que sabía y luego me dijeron ahorita me vas a decir la verdad y me agacharon la cabeza y me dijeron que cerrara los ojos, y me volvieron a preguntar lo mismo y les volví a contestar lo mismo y de pronto recibí tres golpes con la mano extendida en la nuca y posteriormente me vendaron los ojos y me dijeron ahora si vas a hablar y me pusieron una bolsa de plástico en la cabeza y empecé a adsorber la bolsa contra mi boca porque el aire me faltaba y un elemento presionó con su mano la nariz como dos veces, y sentí que me oriné por la presión que me estaban dándome los policías me quitaron la bolsa, y…



Sin embargo, afirma La Señora GRACIELA GUZMAN SALAS que estas acciones legales que llevó a cabo, sólo sirvieron para que las agresiones físicas y sicológicas aumentaran, incluso han llegado a amenazarla de muerte como así ocurrió el pasado fin de semana, donde dos sujetos desconocidos que dijeron pertenecer al grupo de los ZETAS llegaron a su domicilio y le advirtieron que se retractara de todo lo que había denunciado en los periódicos y se largara del Municipio o si no tanto ella como su familia pagarían las consecuencias.

Por lo que la afectada ha decidido poner en venta el negocio que tiene en Tecuala, así como también elaborar su testamento (por si acaso), inclusive ha decido irse del municipio por el temor fundado de que estos delincuentes regresen a cumplir lo que le han prometido.

Para finalizar la señora solicita de manera urgente la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, así como la intervención del Presidente de la República Lic. Felipe Calderón para que pongan un alto a las agresiones físicas y sicológicas que está realizando la partida de la Policía Estatal Investigadora en Tecuala